Con los ojos semi cerrados, aquietamos la respiración, nos hacemos conscientes de nuestro cuerpo, nuestras emociones y pensamientos…
Me siento en tranquilidad y armonía… y me preparo para hacer contacto con mi alma… con mi ser interior… Dejo que el foco de la consciencia se deslice…dentro de mi cabeza… muy lentamente… en el interior de la frente… y empiezo a bajar… me detengo  entre mis mandíbulas… a través del cuello… estoy  en la parte alta del pecho (en el timo)… y luego llego al corazón… allí descanso… y establezco mi ser… emito un OM inaudible en mi interior…
Yo soy… y estoy aquí… podría tocarme y percibirme… tengo certeza de que existo… yo soy… y estoy aquí… me experimento como realmente soy… con mi fuerza de voluntad rechazo todo lo que es ajeno a mi y lo pongo en la periferia de mi consciencia… mi capacidad de resistencia crece y me protege de miedos diversos… me protege de pensamientos de desaliento… me protege de infravaloración… estoy en mi centro y soy fuerte…

Entonces en mi interior imagino un punto de luz…que  crece… que se expande como un espacio vacío… me rodea… y me protege… iluminando todo a mi alrededor… Veo ante mi una puerta cerrada… me acerco a ella… se que debo atravesarla… y la abro… la luz del día entra a raudales y veo el horizonte amplio… Entones salgo y me presento al mundo como soy… libre de miedos y de dudas… me abro completamente y permito que la luz y el amor fluyan a través de mi… inspiro profundamente y medito sobre el pensamiento semilla:

“Surjo, y desde el plano de la mente, gobierno”

Siento que estoy en unión con todo lo que está vivo… imagino que alzo una copa en conjunto con todos quienes meditan conmigo en este instante… ya sea estén cerca o lejos de mi… invocamos las energías de luz y amor y visualizamos como esas energías afluyen a nuestra consciencia… dejamos que las cargas de la humanidad descansen en nosotros… las recibimos y elevamos sobre nuestras cabezas y pedimos ayuda… imaginamos, sentimos o visualizamos que esas cargas son absorbidas por la Madre Tierra para ser recicladas… Finalizamos recitando La Gran Invocación.