Mercedes Sosa, 9 de julio.
Hoy te celebro Mercedes Sosa, la muy querida “Negra” tucumana asociada a tantas juntas cantando y tatareando a coro, a tantas nostalgias acumuladas en países que no eran los nuestros, pero donde éramos acogidos con cariño, tantos conciertos y esperanzas. Mercedes nos llevaba las voces de los nuestros “alquimizadas” mediante su propia y potente voz, ¡ay negrita cantora! te recuerdo a ti y nos recuerdo a todos: chilenos, argentinos, uruguayos, peruanos, bolivianos…
Todas las voces todas,
Todas las manos todas,
Toda la sangre puede, ser canción en el viento
Canta conmigo, canta, hermano americano
Libera tu esperanza con un grito en la voz…
La primera vez que Mercedes volvió del exilio a la Argentina (1982), dijo: Lo grande fue que estaba toda la gente, más que amándome a mí, amándose a ellos. Eso nos provocaba.
Su carta natal muestra ese talentoso cometa sobre triángulos de rendimiento que impulsan al cometa a la acción, que lo mueven, lo sacan de su sitio, lo cuestionan y remecen desde las profundidades del alma.
La figura “cometa” de Mercedes se orienta hacia el colectivo con su gran capacidad de entrega y su talento artístico. Muchas cosas a ella no le costaban esfuerzo, podía tener a disposición todo lo que necesitaba, y como desarrolló la modestia necesaria, pudo poner su talento al servicio de los demás. Mercedes necesitaba encontrar el sentido y la utilidad de las cosas, y eso era más fuerte en ella que el sentido por la belleza y el placer, porque el placer lo alcanzaba realizando su arte con sentido, estética, armonía y logrando que los “escucha” nos sintiéramos contentos y afortunados. La voluntad de entrega que tenía proviene probablemente del profundo dolor interno causado por esa oposición Saturno-Neptuno, que quizás nadie podía realmente aliviar, solo podía ayudarse a sí misma mediante su propio canto, o su propia alma.
Hay muchos eventos en su vida que hablan de sus dolores, el exilio fue uno grande e importante, la muerte de su segundo marido, y el abandono del primero: Es interesante el hecho de que Mercedes, se enamora a primera vista del que fue su marido y se traslada con él a Mendoza alrededor del tiempo en que el Punto de la Edad (PE) hace conjunción a Neptuno (el amor altruista, idealizado) y oposición a Saturno (la seguridad), y que unos años después, cuando el PE pasa por la conjunción Luna-Marte, ella cuenta: “Yo no dejé ese matrimonio. Él me dejó. Me abandonó con Fabián, con mi chiquito […] Una chica tucumana se casa para toda la vida. Eso me destruyó”. Simultáneamente en ese tiempo, un evento fortuito la consagró popularmente. Un cantante folklórico ya consagrado la invitó al escenario de un festival, donde el publicó estalló en aplausos incluso antes de que terminara su canción.
También hay múltiples pruebas de su talento, entrega musical y a su causa, la voz de las Américas. En su último álbum “Cantoras II” invitó a cantar a dúo a diferentes personalidades de la música, entre otros al famoso Gustavo Cerati, quien dijo: «Me gustó que me convocara para cantar una canción juntos. Fue increíble que me dijera que estaba ella muy nerviosa de verme a mí, o que tuviera palabras de admiración por mi voz siendo ella LA voz. Una persona humilde y grande».
Recuerdo también cuando tuvimos la oportunidad de hablarle después de un concierto en Uppsala. Subimos varios a su camarín, la mayoría argentinos, y nosotras chilenas, todos llorábamos discretamente, hasta que una de las amigas, con voz bajita por la emoción le dice: “yo también soy tucumana”, y Mercedes grita “Tucumán”, con ese acento marcado de ella… y se abrazan y gritan juntas: “Tucumán”, y ya el resto desatados llorando. Fue hermoso.
Por Ana Quiroga, directora Escuela Huber Chile.
Muy bueno Ana María, al parecer tu corazón brincó a mil por hora, en especial ese encuentro con Mercedes Sosa en Uppsala, ciudad tan querida y tan presente en tus memorias, una gran cantante, admiradísima en todo el mundo, gran ser humano que se merece todos los aplausos, desde aquí para que resuenen en la eternidad.
Felicitaciones Ana María, un abrazo?
Gracias! y asi fue… mi corazón a mil!
Que bonito y emotivo Anita, hasta me vi en ese camerin llorando de emocion!!
Muchas gracias querida… cuando lo escribí, también se me soltó solo un lagrimón…